¿La COP26 cumplió con sus metas? ¿Y qué significa para los negocios?

Contribuido por: Amy Haddon, Directora de Marketing de Contenido Global y Servicios de Comunicaciones, Schneider Electric
En noviembre de 2021, tuve el privilegio de representar a Schneider Electric en la Conferencia de las Partes (COP) de las Naciones Unidas sobre el cambio climático en Glasgow, Escocia. En el transcurso de más de dos semanas, representantes de casi todos los países del mundo se reunieron para alinearse con relación a los próximos pasos más críticos en la lucha global contra el cambio climático, lo que resultó en el Pacto Climático de Glasgow (GCP, en su título en inglés – lea el texto completo aquí).
Esta COP fue diferente a las 25 iteraciones anteriores en que tuvo lugar durante una pandemia global. También fue el quinto aniversario (aunque se retrasó un año debido a la COVID-19) del histórico Acuerdo de París, ejecutado en 2015, lo que lo convirtió en un año histórico en el que los países recibieron el mandato de revisar y actualizar sus contribuciones determinadas a nivel nacional (NDC).
¿Entonces qué pasó? ¿La COP26 entregó lo que esperaba lograr? Y, lo que es más importante, ¿cuáles son las implicaciones para los negocios?
Compromisos climáticos claves
Hubo una serie de compromisos climáticos claves realizados durante la COP26 que tendrán ramificaciones positivas a largo plazo, especialmente si las promesas se cumplen (teniendo en cuenta que la COP no es vinculante).
Estos incluyeron:
- El anuncio de India de que alcanzará cero emisiones netas para 2070 con un 50% de electricidad renovable para 2030 (puede encontrar un análisis útil de este objetivo aquí);
- Un compromiso de más de 100 países, incluidos Colombia y Brasil, para poner un fin a la deforestación para 2030, un primer paso crítico hacia la preservación de los sumideros de carbono y de la biodiversidad;
- Un pacto de más de 100 países para reducir el metano en un 30% para 2030, esencial para reducir este potente y frecuente gas de efecto invernadero;
- Un convenio de $130 billones en fondos para la transición a cero emisiones netas por parte de GFANZ, la Alianza Financiera de Glasgow para las Cero Emisiones Netas;
- El regreso de los EE. UU. a la mesa de negociaciones, acompañado de los anuncios del presidente Biden sobre el Plan de Emergencia del Presidente para la Adaptación y la Resiliencia (PREPARE, en inglés), la hoja de ruta a largo plazo de EE. UU. para lograr cero emisiones netas para 2050, la Net Zero World Initiative para el desarrollo de tecnologías, la Clean Energy Demand Initiative (CEDI) para expandir las oportunidades del mercado global para la energía limpia, la First Movers Coalition, un consorcio de corporaciones dedicadas a la adquisición ecológica, y una alianza histórico entre EE. UU. y China sobre la acción climática.
- Una variedad de compromisos más pequeños, pero significativos, para acelerar la transición energética, la producción de cero con cero emisiones netas, la eliminación de combustibles fósiles a nivel mundial y específicamente en Sudáfrica, ambiciones de adopción de vehículos eléctricos y exploración de energía nuclear y tecnologías de captura y almacenamiento de carbono.
El GCP frustró
Sin embargo, a pesar de sus ambiciones, el consenso general es que el Pacto Climático de Glasgow (GCP) no cumplió con las expectativas. Uno de los objetivos de la conferencia era "mantener vivo el 1,5", con la esperanza de que las contribuciones nacionales lograran una trayectoria que evitara el calentamiento a 1,5 grados centígrados. En realidad, las promesas actuales se acercan más a un límite de 2,5 grados centígrados, lo que no es suficiente para evitar los peores impactos del calentamiento global.
Un resultado mixto de las negociaciones fue que la mención de la reducción de combustibles fósiles se incluyó en el acuerdo final por primera vez desde la COP original de 1995. Sin embargo, aunque las negociaciones finales iban por buen camino para incluir el lenguaje de “eliminación gradual” de la energía del carbón, cambios de último momento de varios países dieron como resultado la adopción del término “reducción gradual” en la versión final del GCP, una decepción para muchos dado a la urgencia del cambio climático según los últimos avances científicos.
No obstante, el GCP no fue una pérdida total. Los negociadores pudieron finalizar el libro de reglas del Acuerdo de París, que rige cómo los países deben establecer e informar sobre sus objetivos de reducción de emisiones. Más de 100 países presentaron compromisos revisados, elevando el total de emisiones globales cubiertas por las NDC al 80%, y los países deben estar preparados para revisar sus compromisos para la COP27, un cronograma acelerado.
También se hicieron promesas para eliminar gradualmente los subsidios ineficientes para la generación de electricidad con combustibles fósiles, y se incluyó un lenguaje innovador sobre los mecanismos de comercio de carbono (el famoso Artículo 6 del Acuerdo de París), allanando el camino para el crecimiento de los mercados globales voluntarios y obligatorios de compensación de carbono. Además, muchos sectores individuales, incluido el automotriz, establecieron nuevas ambiciones para la transformación industrial.
Resultado final para los negocios
La comunidad empresarial tuvo una presencia mucho mayor en esta COP que en cualquier otra, incluida la de París en 2015, y prevalecieron las discusiones sobre el papel de los llamados "actores no estatales".
Pero ¿qué impacto tienen en los negocios las promesas hechas y el GCP finalizado?
Algunas cosas para observar:
- La transición energética
La tendencia, que estaba en marcha antes de la COP26, recibió un impulso con las disposiciones incluidas para una reducción gradual de la energía del carbón, la eliminación gradual de los subsidios fósiles y varios de los compromisos individuales y nacionales hacia la energía limpia y la electrificación. Si bien las decisiones tomadas no tuvieron el impacto esperado, estas nuevas ambiciones seguramente acelerarán la sustitución del carbón y favorecerán una producción más eficiente de energías no renovable como el gas natural y la energía nuclear.
Las empresas ya han jugado un papel importante en la aceleración de la transición energética y no muestran señales de desaceleración, a pesar de los problemas de la cadena de suministro de energía renovable y la creciente volatilidad tanto en el suministro de la energía como en los precios a nivel mundial. Sin embargo, gracias al lenguaje en el GCP que tiende hacia al futuro, combinado con muchos mandatos geográficos individuales (como el paquete "Apto para 55" de la UE), es casi seguro que se acelerará aún más la transición a un sistema de energía limpia.
Las empresas pueden adelantarse a la curva de la energía limpia persiguiendo sus propias oportunidades ahora. Una manera fácil de hacerlo es hablar con nuestro equipo de expertos en gestión energética haciendo clic aquí.
- Biodiversidad y soluciones basadas en la naturaleza
Los mecanismos de reducción de emisiones en forma de forestación, conservación de bosques, restauración de suelos y protección/restauración de océanos y criosfera fueron un gran enfoque de la COP26 y de su propio evento, COP15, en octubre de 2021. Las empresas con intereses en el uso de la tierra, la agricultura y otras industrias relacionadas pueden anticipar que habrá una presión creciente y una posible legislación en estas áreas.
Un desarrollo notable es el Grupo de Trabajo sobre Divulgaciones Financieras relacionadas con la Naturaleza (TNFD, en inglés), que está creando un marco que ayudará a las instituciones financieras y las empresas a incorporar los riesgos y las oportunidades relacionados con la naturaleza en su planificación estratégica.
- Estandarización de compromisos cero neto
Si bien no está incluido en las negociaciones formales de la COP26, existe un llamado cada vez mayor a nivel mundial, para definiciones y marcos de informes estandarizados para compromisos cero neto (net-zero). El reciente desarrollo de la Junta Internacional de Normas de Sostenibilidad (ISSB, en su sigla en inglés) de las Normas Internacionales de Información Financiera (IFRS) es un paso hacia un estándar de informes más integrado y universal, y el Estándar SBTi Corporate Net-Zero aporta algo de claridad al cero neto para la comunidad empresarial, pero aún queda un largo camino por ir.
Lo que está menos claro es quién tiene la responsabilidad del desarrollo de estas definiciones y marcos. ¿Debería regularse, o es algo que la comunidad empresarial debe desarrollar por sí misma? Las organizaciones pueden participar en este tema a través de sus asociaciones empresariales, que son influyentes por derecho propio y en los responsables de la formulación de políticas.
- Transparencia, divulgación y comunicaciones
Finalmente, organizaciones de todos los tamaños y de todos los sectores están hablando de comunicaciones. La necesidad de comunicar acerca de la energía y la sostenibilidad a las partes interesadas es una consideración y una necesidad cada vez mayor, en especial porque estas partes interesadas se convierten en participantes esenciales en la transición energética. La fluidez en la narración de historias de sostenibilidad es un nuevo tipo de activo.
Los servicios de comunicaciones de Schneider Electric pueden ayudar. Obtenga más información sobre la evolución de las expectativas del mercado y nuestros servicios en esta grabación de nuestro webinar con MSCI.
La COP es y sigue siendo, fundamentalmente, un evento político. Sin embargo, las empresas tienen un papel cada vez mayor en lo que respecta a la política ambiental proactiva, y anticipamos que las ramificaciones de las actividades de la COP26 se desarrollarán durante los próximos años a nivel organizacional.
Para obtener un análisis más amplio de la COP26, ingrese aquí.